NO TORPEDEÉIS EL YARNBOMBING

A través de una amiga me enteré, hace unos días, que un grupo de guerrilleras del ganchillo habían tenido que anular un yarnbombing en su ciudad (A Coruña) porque la policía les ordenó desmontar la instalación. De todas formas, el grupo no va a dejar sus actividades por eso y ya están planeando un nuevo evento.

Puedo comprender que la venta ambulante sin permiso esté prohibida y que puedan desalojar a quienes la realizan. Puedo entender que los graffitis puedan estar prohibidos en edificios públicos y privados (aunque en una tapia no veo yo porqué no se va a poder pintar, que hay gente que hace verdaderas maravillas en feas tapias de abandonados solares) y encuentro lógico que puedan desalojar a gente que esté haciendo un botellón y molestando. Porque nadie ha visto aún botellones silenciosos e higiénicos, que yo sepa.

Pero la gente que hace guerrillas laneras no sólo no hace ningún tipo de destrozo, si no que embellece el lugar, que decora con materiales que son de “quita y pon”, que no ensucian ni contaminan. Generalmente es gente a la que le preocupa el medio ambiente y que intenta mejorar la ciudad de forma efímera a través del arte de tejer. No sólo eso, si no que también crea cierta conciencia hacia nuestro entorno. Muchas de las instalaciones desaparecen en unas pocas horas, bien porque la gente se las va llevando o porque las mismas guerrilleras las desmontan.

Mi única experiencia en este sentido fue el primer yarnbombing del grupo A Punto!! para San Valentín. Nuestros corazones de lana decoraron, durante unas cuantas horas, la reja de un jardín céntrico de mi ciudad y, además de embellecer efímeramente el entorno, hicieron feliz a mucha gente. Los corazones iban acompañados de frases o palabras de amor y la gente los podía coger y llevárselos como un recuerdo, gratuito y hecho con amor de aquel día.

En muchos países, los yarnbombings o guerrillas del ganchillo no sólo son algo habitual, son una forma más de crear, de compartir, de concienciar.

Las chicas de A Punto!!, por supuesto, apoyamos desde Barcelona la acción de estas guerrilleras coruñesas y animamos a cualquier crochetera de la zona a que se una a ellas. Están preparando una nueva acción y buscan colaboradores. Necesitan muchos cuadrados en lana, a ganchillo o calceta, de 20x20. ¿Te apuntas?

Más información en su página de Facebook , o en su blog.